sábado, 24 de febrero de 2007

Equilibrium.

No creo en la predestinación, sí creo en el equilibrio, en la tendencia del fiel a ir al centro, y por supuesto, si va con fuerza hacia un lado, retornara con fuerza aproximadamente igual o parecida hacia el opuesto, así hasta alcanzar de a poco un término medio, un estado de equilibrio relativo. ¿A que viene esto?, pues hoy pensaba, luego debo existir, en el equilibrio al que ha derivado esta nuestra ínsula; no tenemos una naturaleza agresiva, es todo bonanza, sin animales tales como víboras o serpientes venenosas, felinos degolladores o por la parte del clima, un desierto con un sol encima por el día que te saca todo el líquido del cuerpo y temperaturas elevadísimas, y por las noches un frío gélido, o algo como Anchorage, que le congela las orejas, para decirlo decentemente, a cualquiera. Esta isla de Cuba es un paraíso inofensivo en cuanto a naturaleza, así que la madre Natura, decidió equilibrarlo con fieras bípedas y un reino inhumano, ahí está el equilibrio. Lo cual me ha hecho pensar en la posibilidad de importar fieras cuadrúpedas y víboras dos pasos (¿o son tres?), de esas al menos podemos esperar lo peor siempre en cuanto a riesgos, pero estoy seguro que coincidirá el lector, que es mejor el enemigo que viene de frente y no el que se arrastra, sobre todo si se hace pasar por humano y viste color vegetación.

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